lunes, 30 de marzo de 2020

El Zoo de Joaquìn. Pablo Bernasconi.

 A partir de objetos cotidianos, este curioso niño inventa nuevos animales para que le hagan compañía. 






Lobos. Emily Gravett

Un curioso conejo se dirige a una biblioteca y encuentra un libro sobre lobos muy interesante. Pero  no se espera con el final de este libro!!!
¿Conoces otros libros de Lobos?, Coméntanos cuales!!

Cynthia y Silvia.


Cuero Negro, Vaca Blanca. Pablo Bernasconi.

"Una mañana de sol, la vaca màs coqueta de la granja se dio cuenta por primera vez , de que su cuero estaba lleno de manchas negras..." Así comienza esta bella historia de manchas, búsqueda  y descubrimiento, donde una vaca muy especial se asoma a la aventura de ser distinta.

Qué lo disfruten!!
Cynthia y Silvia.


miércoles, 25 de marzo de 2020

El punto: Peter. H. Reynolds

Al terminar la clase de arte, Vashti se queda sentada en su silla mirando la hoja de papel delante de ella no sabe que dibujar y tampoco se siente capaz de hacerlo. Todo cambia cuando se le acerca la profesora y a raíz de un enojo Vashti  hace un gran descubrimiento. 

¿Nos comentas que te pareció la historia?. 


Mateo y su gato rojo: Silvia Rocha

Encantado con su regalo, Mateo decide crear un gato rojo lleno de felicidad. Sin embargo a los pocos días se da cuenta que su gato se muestra triste, lo cual lo preocupa. Entonces decide dibujar muchas cosas que podrían devolverle la alegría  a su mascota ilustrada.
¿Qué te pareció la historia?

Anthony Browne: Ramón Preocupòn

Ramón es un chico muy particular que se preocupa por casi todo, tanto que no puede dormir.
Un día su abuela se da cuenta que lo podría ayudar. ¿Será la solución para Ramón ? ¿Te animas a hacer tus quitapenas?.

Esperamos tus comentarios!
Cynthia y Silvia.


Liliana Bodoc.

"A veces, la vida se comporta como el viento: desordena y arrasa. Algo susurra, pero no se entiende. A su paso todo peligra; hasta aquello que tiene raíces. Los edificios por ejemplo. O las costumbres cotidianas."  Asì comienza Liliana Bodoc contando el cuento Amigos por el viento, historia que a pesar de sus diferencias une  a la protagonista con Juanjo, el hijo de el nuevo novio de su madre. (segundo ciclo).

La mejor luna.
Melina, la gata de Juan, sòlo es feliz cuando la luna està redonda y blanca. Pero la luna va y viene, y la gata se entristece cuando la ve menguar. A Juan no le gusta ver a su amiga así, entonces se contacta con su amigo Pedro que es pintor y le dan una gran sorpresa a su gata.
(Primer ciclo).


lunes, 23 de marzo de 2020

Para leer en familia

Había una vez un rey grande, en un país chiquito. 
En el país chiquito vivían hombres, mujeres y niños. 
Pero el rey nunca hablaba con ellos, solamente les ordenaba. 
Y como no hablaba con ellos, no sabía lo que querían; y si por casualidad los sabía, no le interesaba.

 El rey grande del país chiquito, ordenaba, solamente ordenaba: ordenaba esto, aquello y lo de más allá, que hablaran o que no hablaran, que hicieran así o que hicieran asá. 
Tantas órdenes dio, que un día no tuvo más cosas para ordenar. 
Entonces se encerró en su castillo y pensó, hasta que se decidió: “Ordenare que todos pinten sus casa de gris”. Y todos pintaron sus casas de gris. 

Todos menos uno; uno que estaba sentado mirando el cielo y vio pasar una paloma roja, azul y blanca.
“¡OH, qué linda!, dijo maravillado, “pintaré mi casa de rojo, azul y blanco!”. 
Y la pintó nomás.
 Cuando el rey miró desde su torre y vio entre las casas grises una roja, azul y blanca, se cayó de espaldas una vez, pero enseguida se levantó y ordenó a sus guardias: 
— ¡Traigan inmediatamente a uno que pintó su casa de rojo, azul y blanco!
 Los guardias aprontaron sus ojos para verlo todo, sus orejas para oír y se marcharon. 
Pero mientras llegaban a la casa de “uno”, otro que viva en la casa vecina dijo: 
“Qué linda casa; yo también pintaré la mía así”. 
Y la pintó nomás.
Entonces cuando los guardias llegaron, no supieron cuál era la casa de uno y cuál la casa de otro, así que regresaron al castillo y hablaron con el rey.
— ¡No puede ser —dijo el rey, y miró desde la torre. Al ver lo que vio se cayó de espaldas dos veces, pero enseguida se levantó. Y ordenó a sus guardias: 
— Me traen a uno y a otro, ¡inmediatamente! 
Pero ya un tercero había visto las dos casas de rojo, azul y blanco y en un instante pintó la suya.

Los guardias no tuvieron más remedio que regresar y preguntarle al rey: 
— ¿Qué hacemos, traemos a uno, a otro y a otro?
 Entonces el rey se cayó de espaldas tres veces, y los guardias tuvieron que ayudarlo a levantarse.
 — ¡Traen a los tres! —dijo en cuanto estuvo levantado. Pero cuando los guardias bajaron, no había tres casas pintadas. 
Había 333.333.
—Bueno— dijeron los guardias cuando terminaron de contarlas. —Se lo diremos al rey. 
Y el rey se cayó de espaldas una vez, dos, cuatro, ocho, dieciséis, treinta y dos, sesenta y cuatro y ciento veintiocho veces. 
Mientras se caía y lo levantaban, el rey ordenaba.
 — ¡Que me traigan todo lo que sea rojo, azul y blanco! Los guardias bajaron ligerito.

En la ciudad había 333.333 casas rojas, azules y blancas, y las aceras eran rojas, azules y blancas, y los perros metían las colas en los tachos de pintura y luego se sacudían al lado de los árboles, los jinetes con sus ropas recién pintadas subían a los caballos y los caballos al galopar dejaban los caminos pintados; y las palomas mojaban sus patitas en los charcos de pintura que brillaban al sol, luego volaban a los palomares, y los palomeros pintaban las alas de las palomas así que cuando estas volaban por el cielo parecían barriles de colores: y todos las miraban y se sentían muy contentos.

Todo era rojo, azul y blanco. 
Todo menos el rey, sus guardias y el castillo. 
— ¡Todo aquel que sea rojo, azul y banco debe marchar inmediatamente al castillo! ¡El rey lo ordena! —dijeron los guardias. Y todos hombres, mujeres, niños, ancianos, caballos, perros y pájaros, gatos y palomas, todos los que podían marchar, llegaron al castillo. Eran tantos, tantos, y estaban tan entusiasmados, que al momento el castillo, las murallas, los fosos, los estandartes,las banderas, quedaron de color rojo azul y blanco. Y los guardias también. 
Entonces el rey se cayó de espaldas una sola vez, pero tan fuerte que no se levantó más.

El rey de la comarca vecina, al mirar desde lo alto de su torre dijo: 
—Algo ha sucedido, el rey del país chiquito ha cambiado el color de sus estandartes, enviaré a mis emisarios para que averigüen lo que ha sucedido. 
— ¿Qué ha sucedido?, ¿qué ha sucedido? —preguntaron los emisarios, cuando estuvieron en presencia del rey. 
Pero el rey grande del país chiquito estaba tan caído, que ni siquiera podía contestar.

Entonces “uno” dijo: 
—Resulta que yo estaba en la puerta de mi casa, tomando el fresco, mirando el cielo, y vi. Pasar una paloma roja, azul y blanca, y entonces... y siguió contando todo lo que había sucedido.
 —Pondremos sobre aviso a nuestro rey –dijeron los emisarios del país vecino, no vaya a ser que le pase lo mismo. 
Y marcharon al galope.
Claro que los caballos llevaban ya sus patas pintadas, y mientras galopaban, pintaban los caminos de rojo, azul y blanco...
Pero fueron las palomas, las que primero llegaron a la comarca del rey vecino. 
Y uno que esta sentado en la puerta de su casa tomando el fresco, las vio y dijo:
 — ¡OH, qué lindo!, pintaré mi casa de rojo, azul y blanco. 
Y la pintó nomás y... como pueden ustedes imaginar este cuento que acá termina por otro lado vuelve a empezar.


Los Autores Nos Leen

El colectivo LIJ, es el grupo de autores argentinos de literatura infantil y juvenil. 
En esta ocasión nos comparten lecturas de libros prohibidos en la dictadura militar. 
  

Mercedes Pérez Sabbi lee La Ultrabomba de Mario Lodi



Paula Bombara lee El caso Gaspar de Bornemann


Mario Méndez lee el comienzo de El golpe y los chicos de Graciela Montes



Laura Ávila lee a Álvaro Yunque.


Márgara Averbach lee El deshollinador que no tenía trabajo, de Laura Devetach.

Memoria, Verdad y Justicia


24 de marzo: Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia

·        En la calle, la historia: 24 de marzo - Canal Encuentro HD


·       Abuelas de Plaza de Mayo
h



24 de marzo Día de la Memoria la Verdad y la Justicia.


Compartimos algunos cuentos de autores argentinos que se dedicaban de escribir cuentos infantiles, los cuales muchos de ellos fueron prohibidos en la dictadura militar.




Un elefante ocupa mucho espacio. Beatriz Dourmec.
https://youtu.be/5tTcfdheatc



La Planta de Bartolo. Laura Devetach.

https://youtu.be/O8y_luncPOs

El Caso Gaspar. Elsa Borneman

https://youtu.be/75_weoUpX8I